jueves, 17 de diciembre de 2015

LAS DUDAS DE MELPÓMENE,

 LAS DUDAS DE MELPÓMENE  

Quiero creer que fue cosa de  Eros, que siempre lleva prisa, que yo no tuve que ver, aunque tengo mis dudas. Me digo que  dejé constancia, en sus más de ochenta obras dramáticas, de mi apoyo  incondicional. Pero Clío,  últimamente me falla tanto la  memoria,  que necesito que rebusques en la tuya y me digas qué pasó ese día, cuando una  tortuga caída del cielo mató a Esquilo. Reafírmame Clío, ¿verdad que no fui yo, yendo a inspirar a Sófocles, quien chocó con el quebrantahuesos que transportaba el quelonio?

No hay comentarios:

Publicar un comentario