lunes, 28 de marzo de 2016

LOS OJOS DE UN NIÑO

http://estanochetecuento.com/35-los-ojos-de-un-nino-paloma-hidalgo-diez/




Para ENTC, Esta Noche Te Cuento, tema un viaje al espacio.

Esta es mi propuesta:





LOS OJOS DE UN NIÑO


Los periodistas que iban a filmar a toda la familia esperando al gran héroe que volvía, nos dejaron diez minutos para aprendernos lo que debíamos decir sobre él.  Al parecer, a nuestros compatriotas, no iba a resultarles  muy agradable escuchar lo mucho que le odiábamos mi hermano y yo, por haber dejado de ser el taxista con el que jugábamos todos los días. Después comenzaron a grabar. En todas las televisiones se recibían  en directo imágenes de nuestro pelo rubio bien repeinado, y de los pantaloncitos cortos a juego con los vivos de las camisas blancas que llevábamos. También de mis labios, por ser el pequeño,  mientras explicaba al mundo que me alegraba mucho de que mi papá fuera astronauta y de que pudiera salir a jugar con la luna y las estrellas todas las noches.  Pero ni un solo primer plano de nuestras miradas. Papá siempre nos pedía que le mirásemos a los ojos; decía, aunque quieran, los ojos de un niño no saben mentir. Papá tenía razón. Cuando,  minutos después, el transbordador se desintegraba al efectuar la entrada en la atmósfera, nuestros iris, tan azules como el cielo, llenaban la pantalla de dolor, angustia, e incredulidad.

viernes, 25 de marzo de 2016

FUTURO IMPERFECTO


EL AVIONCITO

Escuchar el crujido del avioncito bajo sus propios pies me hizo feliz. Después las lágrimas cocodrilianas de mi hermano y la facilidad de mamá para creer su versión me dibujaron un futuro mucho más triste: al día siguiente, y con el dinero de mi hucha, le comprarían otro más grande.



Para leerlo en la página: http://www.cincuentapalabras.com/2016/03/futuro-imperfecto.html?showComment=1458943856873#c6306511703363631335

sábado, 19 de marzo de 2016

COMODINES, finalista en Wonderland

COMODINES
Como sombras disipadas por un nuevo amanecer, los barquitos de pan hundiéndose en el plato de sopa. Como huellas borradas por las olas, las manos colocando la servilleta al cuello. Como el humo de la chimenea bailando con el viento, la cuchara en dirección a la boca. Después, un poco de pescado hervido, sin espinas y con mucha paciencia, y quizás media manzana.También un lavado de dientes con pasta mentolada, y dos pastillas de valeriana antes de acostarse en el sitio de su mujer, para evitar verlo vacío al despertar, como un solar abandonado en medio de la ciudad.


Microrrelato finalista en Wonderland el 19/03/2016

jueves, 10 de marzo de 2016

LOS OJOS DE LOS NIÑOS




http://estanochetecuento.com/35-los-ojos-de-un-nino-paloma-hidalgo-diez/

LOS OJOS DE LOS NIÑOS
Los periodistas que iban a filmar a toda la familia esperando al gran héroe que volvía, nos dejaron diez minutos para aprendernos lo que debíamos decir sobre él. Al parecer, a nuestros compatriotas, no iba a resultarles muy agradable escuchar lo mucho que le odiábamos mi hermano y yo, por haber dejado de ser el taxista con el que jugábamos todos los días. Después comenzaron a grabar. En todas las televisiones se recibían en directo imágenes de nuestro pelo rubio bien repeinado, y de los pantaloncitos cortos a juego con los vivos de las camisas blancas que llevábamos. También de mis labios, por ser el pequeño, mientras explicaba al mundo que me alegraba mucho de que mi papá fuera astronauta y de que pudiera salir a jugar con la luna y las estrellas todas las noches. Pero ni un solo primer plano de nuestras miradas. Papá siempre nos pedía que le mirásemos a los ojos. Decía, aunque quieran, los ojos de un niño no saben mentir. Papá tenía razón. Cuando, minutos después, el transbordador se desintegraba al efectuar su entrada en la atmósfera, nuestros iris, tan azules como el cielo, llenaban la pantalla de dolor, angustia, e incredulidad.

jueves, 17 de diciembre de 2015

LAS DUDAS DE MELPÓMENE,

 LAS DUDAS DE MELPÓMENE  

Quiero creer que fue cosa de  Eros, que siempre lleva prisa, que yo no tuve que ver, aunque tengo mis dudas. Me digo que  dejé constancia, en sus más de ochenta obras dramáticas, de mi apoyo  incondicional. Pero Clío,  últimamente me falla tanto la  memoria,  que necesito que rebusques en la tuya y me digas qué pasó ese día, cuando una  tortuga caída del cielo mató a Esquilo. Reafírmame Clío, ¿verdad que no fui yo, yendo a inspirar a Sófocles, quien chocó con el quebrantahuesos que transportaba el quelonio?

sábado, 5 de diciembre de 2015

EL LUNARCITO, FINALISTA EN WONDERLAND.

De vuelta.



Finalista en Wonderland



EL LUNARCITO 
Hay días que al Dr. Antonio Paniagua no le gusta ser el Dr. Paniagua, preferiría ser el señor Antonio, el conserje de alguno de los edificios que se ven a lo lejos  desde la ventana de su consulta. Días como hoy. Plomizos, desapacibles, y largos. Son las siete.  El médico espera a la próxima paciente, que llega con retraso, releyendo los resultados de las pruebas en la pantalla del ordenador. Imprime una copia en papel para ella. Le gustaría saber que ha elegido la mejor forma de explicarle lo que tiene, o más exactamente, lo que ya no tiene: operación.